PARQUE DEL GUINARDÓ. BARCELONA

El ámbito objeto de ordenación es una pieza de suelo de cerca de seis hectáreas, en fuerte pendiente, situada en la franja de contacto entre el llano de Barcelona, donde muere la cuadrícula del ensanche Cerdà, y la traza más menuda y sinuosa del barrio del Guinardó, en el lugar donde la ciudad empieza a escalar los bordes del Turó del Carmel.

El solar a resolver, contiguo al Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, aloja desde un edificio residencial singular, con amplios jardines, hasta el Centro Cívico del Guinardó, la sede y el campo de un club de fútbol, una escuela y una iglesia, y trazas de tejidos residenciales sin completar. Un antiguo torrente, convertido precariamente en calle de servicio, cruza en vertical el recinto.

Se trataba de plantear una solución coherente que ordenara y conectara los espacios libres, clarificara los usos y abordara la cuestión del paso de la prolongación de la Ronda del Mig, salvando importantes desniveles y atravesando un espacio que vecinos y entidades implicadas reivindicaban como parque y alojamiento de numerosos equipamientos.

La propuesta, ganadora del concurso convocado por el Ayuntamiento de Barcelona, resuelve conjuntamente los dos temas con fuertes exigencias topográficas: el paso del vial y la reubicación del campo de fútbol. Un análisis minucioso en sección permite plantear un vial desdoblado con semivías a diferente cota, una explanada intermedia que aloja el terreno de juego y la formación de parte de la grada como contención de los desniveles generados en esta operación.

El resto del contenido de la propuesta corresponde a la reorganización de las piezas construidas existentes, que se incorporan al programa de equipamientos, alrededor de una lámina de agua utilizable como piscina pública exterior, que ocupa una segunda explanada, y al establecimiento de conexiones peatonales y de servicio practicables en el interior de un ámbito planteado globalmente como un parque.

Del concurso derivó el encargo por parte del Instituto Municipal de Promoción Urbanística del proyecto de ejecución del vial, del campo de fútbol que ocuparía la mediana y de un aparcamiento subterráneo para 500 vehículos, que se desarrollaría a lo largo del vial, en paralelo al túnel del metro, y cuyos accesos enlazarían con la ampliación de la estación del Guinardó, que se incluyó en el proyecto. Paralelamente, se produjo el encargo de redacción de un plan especial, que habría proporcionado apoyo a la ordenación ganadora del concurso.

Sin embargo, los conflictos surgidos en la expropiación de los terrenos obligaron a posponer la ejecución de la obra proyectada cuando ya se encontraba en fase de replanteo. La paralización de la obra, que implicó la pérdida del calendario de los Juegos Olímpicos, condujo finalmente a la simple construcción del vial en base a un trazado esquemático, distinto al que se había planteado en el concurso.